En México, la problemática de la falta de tapas en registros de servicios como telecomunicaciones, luz y agua ha ido en aumento con el paso de los años. Estas tapas se han convertido en objeto de interés para la delincuencia debido a que están fabricadas con fierro fundido, un material que se compra por kilo en establecimientos de chatarra.
El precio de este material oscila entre 5 y 10 pesos por kilo. En promedio, las tapas de alcantarillas pueden pesar hasta 55 kilos, lo que significa que quienes las roban pueden obtener entre 275 y 550 pesos por unidad. Sin embargo, esta ganancia palidece en comparación con el gasto que el Gobierno debe realizar con los recursos públicos para reponer estos productos y sus accesorios. La situación se ha vuelto más crítica, ya que el aumento de reportes ciudadanos sobre registros sin tapa ha sido constante, los robos se han vuelto más frecuentes y la capacidad para abordar estas situaciones se ha visto superada.
Reemplazar una tapa de fierro fundido con otra del mismo material no es una solución viable, dado que existe una alta probabilidad de que sea robada nuevamente. Aunque los vecinos intenten prevenir estos incidentes colocando llantas, tablas o plásticos, esto sigue representando un problema de seguridad civil, ya que la falta de una tapa puede provocar accidentes automovilísticos e incluso peatonales.
Afortunadamente, existen alternativas al fierro fundido, como el concreto polimérico, que está ganando popularidad en la industria. Este material, compuesto por resina y minerales agregados, ofrece numerosas ventajas:
- Alta resistencia a la tracción, flexión, compresión y abrasión.
- Reducción de porosidad y microfisuras en la matriz de cemento.
- Impermeabilidad ante condiciones climáticas adversas.
- Buena adherencia a varios materiales de construcción.
- Alta durabilidad y resistencia al calor y a la radiación UV.
- Aislante eléctrico y resistente a productos químicos.
Es importante destacar que el concreto polimérico no tiene un valor significativo en el mercado de reciclaje en comparación con el fierro. ¿Estás dispuesto a seguir la tendencia del cambio hacia el uso de este material más seguro y duradero?
